NEUROESTMULADORES IMPLANTABLES
Determinados tipos de dolor refractarios a otros tratamientos pueden mejorar mediante la estimulación eléctrica de los cordones posteriores. Esto se hace a través de un electrodo implantado en el espacio epidural.
Tras unos días de prueba, si el mecanismo es eficaz se procede a implantar un generador subcutáneo (algo similar a un marcapasos) que se puede programar a distancia.
El dolor en la extremidad después de una cirugía fallida de espalda o el Síndrome regional complejo de la extremidad son indicaciones de este tratamiento.
Neuroestimuladores epidurales